Las excelencias del trabajo "bien sudado" (1)

Sobre el trabajo en el jardín del Edén

"Ganarás el pan con el sudor de tu frente".

Siempre he oído que se trata de una maldición.

Y lees enGénesis 3... Y sí, "parece" una maldición.

Pero si reflexionas sobre la crisis financiera y sus tremendas consecuencias sociales; o sobre la novedad de nuestro siglo, eso de vender bienes sin necesidad de sudar para producirlos (me refiero a los bienes "informacionales", que al contrario de los bienes materiales, son "multiplicables", en vez de "consumibles") quizás te cuestiones si no será más bien una bendición el ganar el pan con su cuota de sudor correspondiente, aunque en muchas ocasiones sea muy escasa.

¿Pero como puedo pensar que sea una bendición eso de tener que ganar el sustento, cuando leyendo Génesis se concluye que es una maldición?

Bueno, cierto que era una maldición. Pero... ¿respecto a qué era una maldición? ¿Cual era la alternativa contraria al hecho de tener que trabajar, y sudar, si llega el caso, para comer del fruto de la tierra?

(Nota: En todo lo que sigue, ha de entenderse que "Ganar el sustento" o "ganar el pan de cada día" es sinónimo de la obtención de cualquier bien de consumo, sea la comida, la ropa, la casa, el coche, las horas de clase que me dedica un profesor de idioma, las horas de atención de un médico, etc.
En tiempos de Adán y Eva, los bienes se reducían a la comida y el abrigo;
pero hoy día, para la existencia en nuestra socieda, son muchos más los bienes que precisamos consumir.)

Habitualmente se interpreta que la expulsión del Edén era una maldición, porque a partir de esa expulsión Adán y Eva tendrían que comenzar a ganarse el sustento a base de trabajo. De ahí la tan equívoca opinión de que el tener que trabajar para existir es una maldición. Nada más lejos de la realidad. Y espero que cuando acabe con este tema estéis de acuerdo conmigo en que más bien es una bendición, y que cuando se rompe la cadena causal:

...   trabajo > bienes producidos (o adquiridos) > disfrute de dichos bienes ...

... comienzan los problemas.

Me dirás: "Pero eso es lo que se ve en Génesis, que el trabajo es una maldición, consecuencia de la desobediencia de Adán y Eva".

Pues no. Eso no es lo que yo veo en Génesis. Lo que yo veo en Génesis es que el trabajar ya estaba implícito en el hecho de vivir en el Edén, incluso antes de la caída. Puedes leer en Génesis 2:15.-

(2:15) Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.

(Cógete una biblia y compruébalo por ti mismo.)

Así, pues, ya ves que incluso antes de la caída, Adán tenía que currar en el Edén. Quizás la zona del Edén fuese una buena tierra, fácil de trabajar. Quizás su cultivo no suponía un agotamiento extremo. Pero lo cierto y seguro es que desde el inicio Adán tenía que trabajar para el sustento cotidiano.

Alguno se sentirá desencantado, y quizás se pregunte... ¿entonces porqué les expulsaron del paraíso?

Pues no. Al margen de lo que pensases hasta ahora, Adan y Eva no fueron expulsados para privarles de una existencia cómoda y ociosa. Les expulsaron para privarles del algo mucho más valioso e importante.

Lee con detenimiento Génesis 3:22 y 23.-

(3:22)  Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre.  (3:23) Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado.

Como ves por el subrayado del versículo 3:22, la razón fundamental por la que Dios decidió  sacarle del Eden fue porque tras la caída no era conveniente que el hombre tomara del árbol de la vida y comiera y viviera para siempre (???...).

Y esta idea se confirma también por el hecho de que tras la salida del Edén, la protección que Dios puso tenía el objetivo de "guardar el camino del árbol de la vida. Lee el versículo 24:

(3:24) Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.    

Te preguntarás: ¿Entonces, porqué en el versículo 23 dice que Jehová saco al hombre del huerto del Edén para que labrase la tierra de que fue tomado?

Cierto, leyendo sólo ese versículo se podría concluir que el objetivo de la expulsión era hacer que Adán tuviese que trabajar, porque de quedarse en el Edén no sería preciso que trabajase para el sustento. Pero estarás de acuerdo conmigo que hay que interpretar todo el contexto, y ya vimos en el versículo 2:15 que Dios puso a Adán en el Edén justamente para que lo labrara, además de guardarlo. Por lo tanto, la expulsión nada tenía que ver con una presunta intención divina de que Adán comenzase a trabajar para ganarse su sustento.

Opino que la correcta interpretación del versículo 3:23, en coherencia con el 2:15, el 3:22 y el 3:24 es que el propósito de Dios consistía evitar que Adán se aprovechase de la única posibilidad de tener una vida independiente de las exigencia del mundo físico: enfermedad, muerte, necesidad de trabajar para sustentarse, etc. Esta única posibilidad era el "tomar del árbol de la vida", que "proveía la vida eterna". El vetarles el acceso a ese árbol implicaba no solo que no tendrían esa vida eterna, sino que la vida que en aquellos momentos ya tenían seguiría como hasta entonces: con muerte física cierta, con posibilidad de enfermedad, con necesidad de sustento diario y, por tanto, con necesidad de cultivar la tierra ("trabajarla"); como Dios planeó según el versículo 2:15. La bendición suprema de estar en el Edén consistía en la posibilidad de tomar del árbol de la vida (además de disfrutar de unas tierras fértiles y gratas, como supongo que también serían).

Conclusión:

Y todo esto, ¿para qué? Puse todo esto para:...

1. Desmitificar la idea de que el Edén era un paraíso donde se te daba todo hecho, donde no era preciso trabajar para conseguir los bienes de consumo.
2. Subrayar la idea de que en el mundo físico que por ahora nos toca vivir existe una cadena causal que relaciona el trabajo con la producción de bienes y con el uso y disfrute de dichos bienes.

Ni siquiera en el "Paraíso Terrenal" se saltaban esa cadena causal.

Y es que cuando se ignora y se viola esa serie causal (que también se viola cuando se confunden bienes multiplicables con bienes consumibles), comienzan los problemas.

Ya veremos cómo...